Esther Satorras casi se atropella al hablar. Quiere decir muchas cosas porque se siente en medio de una cruzada en la que lo único que le interesa es restablecer la dignidad que cree que, como mujer, le han pisoteado. Por eso ha decidido denunciar ante la justicia al Departament d’Educació, porque el Instituto Vallvera de Salt decidió no confirmar su continuidad como profesora interina del aula de acogida al acabar el curso 2017-18.Leer más [fa type=»long-arrow-right»]
[fa type=»file-text»] Fuente: La Vanguardia