La evidencia sugiere que el impacto inmediato de la crisis va a ser especialmente duro en salud mental. Pocos estudios controlan por estructura social y salud o cuentan con datos de representatividad suficiente. El trabajo de Gili y colaboradores (gráfico 1) cumple criterios de excelencia y demuestra con fundamento aumentos de las visitas en atención primaria entre 2006 y 2010 del 20% en depresión mayor (ajustado por edad, sexo, renta, educación, empleo, estado civil y ámbito rural/urbano) y del 5%-10% en otros problemas relacionados (distimia, ansiedad, abuso de alcohol, etc.). Aumentan también las visitas por enfermedades transmisibles y el consumo de fármacos sensibles como antidepresivos y antidiabéticos (gráfico 2). En contraste, en la década previa caen las consultas por habitante (gráfico 3).
Gráfico 1 – Aumento de los problemas de salud mental en atención primaria. En porcentaje. 2006-2010
Fuente: Gili, M., Roca, M., Basu, S., Stuckler, D. y McKee, D. (2012): “The mental health risks of economic crisis in Spain: evidence from primary care centres, 2006 and 2010”, en European Journal of Public Health, 22(2).
Gráfico 2 – Evolución del consumo de medicación sensible a la crisis en países de la OCDE. 2000-2009
Fuente: OCDE: Health Data.
Gráfico 3 – Consultas por habitante y año (2009) e incremento en países de la OCDE. 2000-2009
Fuente: OCDE: Health Data.
En los hospitales, aumentan las urgencias –muy altas–. Disminuyen los ingresos medios –ya en mínimos europeos–, aunque aumentan en patologías sensibles: circulatorias, accidentes, suicidios y tumores (gráfico 4). La cirugía cardiaca de alta tecnología aumenta tras la crisis y alcanza máximos en la OCDE (gráfico 5). Desciende la actividad en enfermedades respiratorias y complicaciones del embarazo. Ello puede reflejar impactos indirectos positivos de la crisis (caída de la contaminación y la natalidad –INE, 2012–), o bien efectos intencionados de los recortes (ajustes compensatorios por los aumentos en tecnología y farmacia, en patologías asociadas a la pobreza). En este último caso, generarían gasto diferido, mortalidad evitable y secuelas de por vida en neonatos, madres recientes y enfermos crónicos.
Gráfico 4 – Ingresos hospitalarios. 2009-2010
Fuente: INE, Estadística de establecimientos sanitarios con régimen de internado, varios años.
Gráfico 5 – Angioplastias coronarias en algunos países de la OCDE. Porcentaje del total de revascularizaciones. 2000-2009
Fuente: OCDE, Health Data.