En los últimos años se está percibiendo un aumento en la consideración de la familia, que quizá tenga que ver no sólo con la situación económica familiar sino con la experiencia de satisfacción que en la familia se está teniendo en esta coyuntura de crisis o con la prioridad que se descubre en la familia en general, como aspecto de la vida a la luz de las decepciones que causa la crisis. La tabla 1 corrobora que hay una valoración al alza de la familia al final de la primera década del siglo XXI en España. Al señalar los aspectos a los que se concede mucha importancia en la vida, la diferencia en el porcentaje en 2010 entre la salud y la familia es de menos de un punto a favor de la primera. Familia y salud son valoradas casi por igual como aspectos muy importantes en la vida de las personas encuestadas. Antes no era así, porque la salud superaba en un intervalo de 6-8 puntos a la familia. En 2004, el porcentaje correspondiente a la salud (84,8%) era superior al de la familia (78,5%). Durante el período analizado, el de la salud apenas ha variado: subió dos puntos de 2004 a 2006 y en 2008 y 2010 permaneció aproximadamente igual, 87,4% y 86,9%. El porcentaje de quienes consideran muy importante la familia se ha incrementado 6,9 puntos desde el comienzo de la crisis económica hasta casi alcanzar (86%) el de la salud.
Tabla 1 – Evolución de las personas que consideran las siguientes cuestiones representan en su vida algo muy importante. En porcentaje. 2004-2010
2004 | 2006 | 2008 | 2010 | |
La familia |
78,5
|
81,9
|
79,1
|
86,0
|
Las relaciones de pareja |
61,7
|
54,0
|
||
Los amigos |
45,3
|
46,4
|
45,7
|
41,9
|
La salud |
84,8
|
86,8
|
87,4
|
86,9
|
El trabajo |
54,4
|
56,3
|
58,3
|
62,1
|
El bienestar económico |
40,7
|
44,0
|
||
El tiempo libre/ocio |
36,4
|
32,0
|
41,0
|
35,2
|
El dinero |
28,0
|
31,9
|
Fuente: Elaboración Fundación Encuentro a partir de CIS (2004): Estudio 2.578. Opiniones y actitudes sobre la familia; CIS (2006): Estudio 2.666. Barómetro de diciembre 2006; CIS (2008): Estudio 2.766. Barómetro de octubre 2008; y CIS (2010): Estudio 2.856. Barómetro de diciembre.
Las relaciones de pareja y el trabajo eran aspectos muy valorados por el 61,7% y el 58,3% de los encuestados, respectivamente. En 2010, prácticamente han intercambiado sus posiciones. El porcentaje correspondiente a las relaciones de pareja ha disminuido 7,7 puntos, hasta un 54%. También los vínculos amicales se ven afectados por la crisis. Los amigos han descendido algo en su consideración como un aspecto muy importante: del 45%-46% de 2004 a 2008 al 41,9% de 2010, tres puntos menos.
Otro modo de medir la importancia es otorgándole una valoración en una escala de cero a diez. Hasta que en 2010 se introdujo la opción de la salud, la familia era el aspecto que obtenía mayor nota, manteniéndose siempre por encima del nueve y medio (tabla 2). El tercer aspecto más valorado son las relaciones de pareja, con un 8,69. Por detrás, el trabajo que ha seguido un itinerario diferente: se valoraba con un 8,57 en 2006, bajó en 2008 y 2009 hasta el 8,39 y ha vuelto a subir al 8,51 en 2010. Los amigos tienen una valoración casi idéntica. El tiempo libre sufrió un descenso en 2008, recuperándose algo en 2010.
Tabla 2 – Evolución de la valoración media de algunos aspectos de la vida. ¿Podría decirme qué importancia tienen es su vida los siguientes aspectos? En una escala de 0 a 10 en la que 10 significa “muy importante” y 0 significa “nada importante” ¿dónde se colocaría usted en ella? Valoración media. 2006-2010
2006
|
2008
|
2009
|
2010
|
|
La salud |
9,64
|
|||
La familia |
9,61
|
9,57
|
9,59
|
9,54
|
Las relaciones de pareja |
8,69
|
|||
El trabajo |
8,57
|
8,42
|
8,39
|
8,51
|
El bienestar económico |
8,27
|
|||
Los/as amigos/as |
8,09
|
8,09
|
8,03
|
8,06
|
El tiempo libre |
7,95
|
7,96
|
7,73
|
7,79
|
Fuente: Elaboración Fundación Encuentro a partir de CIS (2006): Estudio 2.633. Barómetro de enero; CIS (2008):Estudio 2.749. Barómetro de enero; CIS (2009): Estudio 2.798. Barómetro de abril; y CIS (2010): Estudio 2.844. Barómetro de septiembre.
Así pues, en conclusión, con la crisis se da menor importancia a los vínculos individuales y más a la realidad grupal familiar. Llevando algo más allá la interpretación, se podría afirmar que quizás la crisis económica hace consciente de la importancia de la pertenencia a comunidades y no tanto a los vínculos más informales o individualizados.