Vivimos en la era de la tecnología y en la que no nos falta de nada, pero a veces caemos en el error de dar todo hecho a los niños, privándoles de la oportunidad de imaginar, deducir, razonar…Desde que tenemos la noticia de que vamos a convertirnos en padres invertimos tiempo y dinero en preparar la habitación del bebé, dejándonos llevar por las necesidades que nos han creado, cuando en realidad lo único que necesitará nuestro hijo al nacer será el regazo de su madre.
La Razón