Alas diez de la mañana, un intenso olor a pan recién hecho sale del aula de Infantil de la escuela Waldorf de Aravaca (Madrid), donde niños de 3 a 6 años amasan tranquilamente mientras cantan. Están rodeados de flores secas, cestos de rafia con lanas y juguetes de madera de todos los colores, y disponen de una casa a la que trepar por una escalera de esparto. Esta zona es el lugar ideal para realizar «juego libre y simbólico», quizás la «asignatura» más diferencial de la pedagogía Waldorf, que este año cumple 100 años.Leer más [fa type=»long-arrow-right»]
[fa type=»file-text»] Fuente: ABC