«No hace falta buscar pornografía, navegas por internet y te encuentras con ella. Viene a ti al descargarte una película, al jugar a un videojuego o a través de Instagram o Twitter». Este es el relato de Manuel, de 16 años, pero también el de muchos adolescentes, sobre el porno. De hecho, se podría llamar Andoni, Raúl, o Jonathan. Pero también Ester o Leticia, porque ellas también juegan este partido. Son historias recogidas por la plataforma online www.daleunavuelta.org, la primera impulsada por psicólogos que ofrece ayuda de este tipo.Leer más [fa type=»long-arrow-right»]
[fa type=»file-text»] Fuente: ABC