How schools are failing working parents — and how some are helping
Había apretado mis dientes a través de la mayoría de las demandas relacionadas con la escuela en desacuerdo con mi vida de madre trabajadora. Los conciertos de media mañana y las reuniones de padres y maestros a última hora de la tarde. Las vacantes obligatorias para «voluntarios» en los ensayos del club de teatro después de la escuela. Los medios días que, por alguna razón, precedían a todas las vacaciones escolares.
La gota que colmó el vaso fue cuando un nuevo programa extraescolar no tuvo espacio para mi hijo.
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[fa type=»file-text»] Fuente: Washington Post
[fa type=»camera”] Fuente de la imagen: Pixabay