Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la obesidad infantil crece día tras día, y dos de cada tres niños no realizan ninguna actividad física diariamente. En un estudio realizado por Fitbit, la mayoría de los padres cree que sus hijos son menos activos que cuando ellos eran niños y están muy preocupados por el peso de sus hijos, su alimentación y niveles de actividad. No solo desean mejorar los hábitos saludables de sus retoños (84 %) sino también mejorar el nivel de actividad física de toda la familia (87 %)6 . El tiempo que los niños pasan delante de las pantallas es uno de los problemas que más citan como reto a la hora de lograr que sus hijos sean menos sedentarios, aunque también expresan su deseo de encontrar maneras de motivarlos a ser más sanos, a que disfruten de un estilo de vida más activo que incluya a toda la familia y que pase por cocinar juntos o simplemente motivarles a tener una mayor consciencia sobre sus propios niveles de actividad.
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