Se situaron en el mapa y, como consecuencia, en la agenda política, a principios del verano del 2016, con la okupación del edificio que bautizaron como La Botànica, la vieja sede del Instituto Botánico, edificio municipal abandonado en Montjuïc. La intención del colectivo Babàlia, grupo de crianza vinculado al ateneo cooperativo La Base que impulsó la okupación, era desarrollar su proyecto en el espacio, pero la situación del edificio -con problemas estructurales- hizo que no fuera posible. Así, no obtuvieron directamente un espacio, pero llamaron la atención de la prensa y de la Administración. «Aquello sirvió para poner la realidad de estos espacios -en los que se funden el mundo de la escuela y el de la familia- sobre la mesa, y vimos que teníamos que organizarnos», señala Andrés, padre de la Rimaieta, grupo de crianza autogestionado también vinculado a La Base, las nuevas generaciones de Babàlia.
Leer más [fa type=»long-arrow-right»]