Por primera vez en cinco años, los Zaborowska llegan a fin de mes. Después de una época pésima, esta familia con siete hijos no se siente ahogada cuando pasan la letra de la hipoteca. Han aparcado la idea de malvender el coche y, aunque su casa de Gizycko (noreste de Polonia) aún necesita reformas, han podido cambiar las ventanas para que no se escape el calor cuando el frío aprieta. “Ya no se me cae el mundo cuando uno de los niños llega con una zapatilla rota o cuando toca visitar al dentista, al que llevábamos tres años sin ir”, cuenta Ewa Zaborowska, de 38 años, que dejó su empleo como maestra cuando nació el segundo de sus hijos. Hoy, el mayor tiene 15 y el pequeño, tres. Los Zaborowska son uno de los 2,5 millones de hogares polacos beneficiarios del programa 500+, una ayuda mensual de 500 zloty (115 euros) por cada hijo a partir del segundo para todas las familias, sin importar sus ingresos; la medida estrella del Gobierno ultraconservador de Ley y Justicia (PiS).
Leer más [fa type=»long-arrow-right»]