Que la tecnología ha cambiado el mundo ya lo sabemos. La posibilidad de estar conectados con la otra parte del planeta, la disponibilidad de casi cualquier cosa en casi cualquier momento, las miles de apps que nos permiten hacer casi de todo… Lo digital ha cambiado nuestras vidas porque ha modificado nuestra voz, nuestro ritmo, nuestro alcance.
La tecnología ha revolucionado nuestra forma de aprender, informarnos, comprar, viajar, leer, relacionarnos, crear. Ha cambiado incluso el hecho de ser padres, porque a la dificultad de educar de siempre se añaden las capas de la inmediatez, la amplificación, el desconocimiento o la globalidad que lo digital incorpora a la vida de nuestros hijos. Lo que Internet (la red, la conectividad, el mundo de inventos creados a partir de la revolución digital) permite a nuestros iKids ha cambiado también su formar de jugar, aprender, hacer amigos, encontrar información, potenciar sus aficiones, desarrollarse, expresarse, estudiar, ocultar secretos…
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