Hola a todas y todos, este es mi último post en el blog Building Bridges con la beca en el Servicio Jesuita a Migrantes. La experiencia que empecé en septiembre del año pasado está a punto de llegar a su fin, creando en mí una mezcla de sentimientos de tristeza por todo lo que dejo aquí, felicidad y agradecimiento por lo que he aprendido junto a mis compañeros y emoción por lo que tiene que llegar. La beca termina, pero gracias a ella puedo continuar mi camino en el mundo de la Cooperación Internacional y realizarme cada día más como persona y como profesional.
Hace un año… Por Resu Vicente
Justo hace un año fue cuando realicé las entrevistas para formar parte del equipo de la Delegación Diocesana de Migraciones gracias a la Cátedra de Refugiados y Migrantes Forzosos del Instituto Universitario de Estudios sobre Migraciones de la Universidad Pontificia de Comillas.
A lo largo de estos doce meses he pasado por un periodo de reto y adaptación a una situación completamente nueva, no solo en el ámbito laboral, sino en el personal. La preparación para mi llegada a Nador se basó en una balanza donde a un lado me encontraba con pensamientos negativos: “¿pero qué necesidad tienes de ir allí?” y al otro positivos: “¡qué bien poder comenzar mi vida laboral de esta manera!” Menos mal que el peso de los pensamientos positivos siempre fue mayor que los negativos.
Los refugiados de Ucrania: Nuestra respuesta coordinada de los jesuitas. Por Alberto Ares sj
Tras tres meses de conflicto en Ucrania, ACNUR calcula que cerca de 6, 6 millones de refugiados han cruzado ya la frontera en busca de refugio en los países vecinos. Desde el inicio de la crisis, las organizaciones humanitarias y de cooperación internacional de la Compañía de Jesús han estado en contacto con la red jesuita para coordinar una emergencia humanitaria.
Tomar consciencia por Isabel Porras
A un mes de terminar el período de prácticas de la Cátedra tomo consciencia de lo mucho que he podido crecer como persona gracias a este período de tiempo. Si pensaba que ya me había hecho una idea algo acertada de cómo podría ser mi futuro profesional o de lo qué podía ofrecer desde mis capacidades, puedo afirmar que uno no deja de sorprenderse cada día o cada semana de la dirección que pueden tomar los acontecimientos.
Mi tiempo en Entreculturas me ha dotado de mayor fuerza, de la tan famosa resiliencia de la que hablan tanto hoy en día. Compartir con los miembros de mi equipo ha sido la guía fundamental durante estos meses: todo lo que me han enseñado, su disposición y escucha continua y el trabajo conjunto.
Cerrando etapas: Mi trabajo en el SJM. Por Elena Martínez.
Para mí, la expresión de “el tiempo vuela” no deja de ganar sentido. Estos últimos 8 meses han pasado tan rápido que antes de sentarme a escribir este post no me había dado cuenta de la montaña rusa que han sido.
Los primeros meses de la beca estuvieron marcados por la novedad: Absorber en mi cabeza todo el entramado del SJM, los diferentes tipos de agentes que conforman esta amplia red y empezar a introducirme poco a poco en las dinámicas diarias para ser más autosuficiente (aquí tengo que agradecer al equipo de proyectos por la paciencia con la que respondían a cada una de mis miles de preguntas y pedir perdón por los pequeños fallos que cometí). Tengo que reconocer que, aunque no era mi primera experiencia profesional, darme cuenta de que aún tenía que saber plasmar conocimientos teóricos y ver lo diferente que es al trabajo de campo que yo había estado haciendo me ha obligado a mejorar la gestión de las expectativas (que no es lo mismo que a resignarme) y a dejarme guiar en esta experiencia.
Siete meses ya… y contando. Por Pilar Sanz
¡Hola, de nuevo!
Han pasado alrededor de siete meses desde mi primer paso por la Oficina Técnica del SJM en Madrid, siete meses de trabajo con el equipo que me recibió y me ha enseñado y ayudado todo este tiempo (¡También me ha “metido caña” de vez en cuando!).
Pasadas las Navidades, parece que todo ha cogido carrerilla, empieza el año y la lista de objetivos en el área de comunicación se vuelve real y el equipo la recorre con ganas de alcanzarlos todos. Mientras nos reuníamos los primeros días, aprendí la elaboración, los pasos a dar en cada uno de los proyectos que había en la agenda. Proyectos con los que podremos acercar a las personas a nuestro trabajo, transmitir un mensaje cercano y cálido sobre las acciones del SJM para la integración de todas las personas migrantes y refugiadas en la sociedad, y que la sociedad se sienta parte de ello.