Valeria Méndez de Vigo y Carla Sala, han publicado un artículo en el blog de Cristianisme i justíciasobre la situación de los niños y niñas refugiados que no tienen una escuela a la cual asistir, reproducimos a continuación el inicio, y te animamos a leer laentrada completa:
Los conflictos bélicos, la violencia generalizada, el cambio climático, la pobreza extrema o las violaciones de derechos humanos son algunos de los motivos que siguen provocando el desplazamiento forzado de miles de familias dentro y fuera de sus países impidiendo, en muchos casos, la educación de niños y niñas.
Valeria Méndez de Vigo, colaboradora del Instituto de Migraciones, ha publicado un artículo en ibe.tv sobre la situación de los refugiados latinoamericanos, reproducimos a continuación el inicio, y te animamos a leer la entrada completa:
Los conflictos armados abiertos en Siria o Irak han centrado la atención de la comunidad internacional debido, sobre todo, al elevado número de personas refugiadas que han llegado a Europa. Mientras las miradas están centradas en la guerra de Siria y en los refugiados procedentes de este país, en América Central hay también situaciones merecedoras de protección internacional que pasan más desapercibidas.
El Sector Social de la Compañía de Jesús ha emitido junto a Cáritas, Justicia y Paz y CONFER un comunicado para expresar nuestro rechazo absoluto al acuerdo aprobado entre la Unión Europea y Turquía sobre personas refugiadas.
Las entidades de acción social de la iglesia en España -Cáritas, CONFER, Sector Social de la Compañía de Jesús y Justicia y Paz- rechazamos el acuerdo suscrito el pasado 18 de marzo entre la Unión Europea y Turquía sobre personas refugiadas. Dicho acuerdo evidencia el fracaso de la Unión Europea en la adopción de una política común de asilo y en brindar protección a las personas refugiadas, otorgando prioridad al control de fronteras. Europa está negando abiertamente la hospitalidad a quienes abandonan involuntariamente sus hogares huyendo de la guerra, la persecución y el hambre. El Acuerdo suscrito es un cambio cosmético, no sustancial respecto al pre- Acuerdo, lo calificamos de deshumanizante ydiscriminatorio y dudamos de que sus medidas puedan aplicarse.